14 mar 2014

Motor de modernidad

Motor de modernidad. Grup R. Arquitectura, arte y diseño [exposición | exhibition]
Fernando Marzá [comisario | curator]
MACBA [Pl. dels Àngels, 1. Barcelona], 06/02/2014 - 24/06/2014

Si alguien se acerca estos días al Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA) se encontrará con una exposición sobre arquitectura catalana de los años 1950, etiquetada bajo el subtítulo de "Grup R. Arquitectura, arte y diseño". Que nadie espere, en todo caso, una exploración rigurosa sobre este grupo.  | If someone comes these days to the Museum of Contemporary Art of Barcelona (MACBA) will find an exhibition of Catalan architecture of the 1950s, labeled under the heading of "Grup R. architecture, art and design" . Do not expect, in any case, a thorough exploration of this group.


Miembros del grup R mostrando su obra con motivo de la 1a. exposición (1952)
Foto Francesc Català-Roca © Fons Fotogràfic F. Català – Roca – Arxiu Fotogràfic de l’Arxiu Històric del Col·legi d’Arquitectes de Catalunya
La exposición ocupa dos salas contiguas del museo. En la primera se introduce el contexto arquitectónico de los años 1940-50 del estado español, sumiso al historicismo de la autarquía. A la vez, se presentan las figuras de los arquitectos Francesc Mitjans o José Antonio Coderch, pioneros en el rechazo al estilo del Régimen, y se insinuan sus relaciones con otros arquitectos con los que compartían intereses (entre ellos, Antoni de Moragas o Josep Maria Sostres). Más adelante se presenta de una manera muy difuminada la gestación del Grup R, como consecuencia de la suma de inquietudes entre esta generación de arquitectos y la siguiente (integrada por Oriol Bohigas, Josep Maria Martorell o Joaquim Gili, entre otros).

La segunda sala muestra muy brevemente los resultados de las actividades del grupo (exposiciones, concursos, seminarios...), sus relaciones con algunos artistas e intelectuales contemporáneos o su vinculación con el contexto arquitectónico europeo. Además se presenta una batería de fotografías de Francesc Català-Roca que recorre diferentes obras de la época -publicadas en la revista Cuadernos de Arquitectura- entre las que se incluyen obras de autores no vinculados al Grup R.

Aunque la exposición pueda ser sugerente en algunos aspectos, con la inclusión de algunos materiales de interés, ni la propuesta museográfica ni las piezas expuestas construyen una narración rigurosa. Para empezar, el objeto de estudio es ciertamente ambiguo -¿arquitectura catalana de los '50 o Grup R?-, sin que esta ambigüedad sea utilizada para trazar claramente los matices. Al contrario, el espectador se ve sometido a una confusión manifiesta.

La importancia del Grup R en la "represa" de la modernidad en la arquitectura catalana está fuera de toda duda. Pero al margen del grupo, la arquitectura de algunos pioneros, la vocación de progreso de otros estudios barceloneses, el papel divulgador del Colegio de Arquitectos y de la revista Cuadernos de Arquitectura, etc., merecen un protagonismo no difuminado en la labor presuntamente heróica del Grup R. De hecho, a estas alturas ya disponemos de construcciones historiográficas que así lo demuestran (empezando por Eclecticismo y vanguardia de Ignasi de Solà-Morales), o contamos con retratos rigurosos del trabajo específico del Grup R (como el texto Grupo R de Carmen Rodríguez y Jorge Torres). En la exposición puede valorarse la heterogeneidad de la mirada, pero se echa en falta rigor en la definición de estos aspectos y su importancia contextual.

Para acabar, hay otro tema que no puedo dejar de mencionar: la magnífica colección de documentos (proyectos, fotografías, documentos de archivo, etc.) de que dispone el Col·legi d'Arquitectes de Catalunya en su Arxiu Històric. Dada la desigual relación que el MACBA ha mantenido hasta ahora con la arquitectura, y la no inclusión de la Arquitectura en el Museo del Diseño como ámbito específico, es una lástima que una colección tan importante como la del COAC no disponga de un espacio permanente de exposición. Aún más, una ciudad que se reconoce en el mundo por su arquitectura, donde solo la marca Gaudí atrae a miles de visitantes cada año, o donde las grandes oficinas internacionales han dejado su huella (eso sí, muchas con dudoso acierto), pide a gritos un Museo de la Arquitectura en el que la investigación histórica se pueda desarrollar con mayor rigor.

David H. Falagán